PUREZA DE ALTA CALIDAD
Cuando una gema brilla como un diamante y además es casi tan dura como éste, lo más probable es que sea una piedra hecha de corindón. Para producir corindón artificial sin defectos se necesitan materias primas de gran pureza y un calor intenso. El corindón monocristalino se crea a partir de óxido de aluminio en polvo (Al2O3) expuesto a una llama de oxígeno/hidrógeno en hornos especiales a 2.150 ºC. Dependiendo de las necesidades específicas, el oxígeno de gran pureza necesario para esta aplicación procede de botellas, bloques o un sistema de suministro de oxígeno.